El monstruo de Santa Elena | Albert Sánchez Piñol

Nunca nadie ha estado recluido en una prisión tan segura, remota e inexpugnable como la que habita Napoleón Bonaparte después de su derrota en Waterloo. Todo el mundo sabe lo que pasó. Los que le rodean, hartos de su ambición inagotable y de sus sucesivos desastres, han decidido tratarlo como lo que realmente es: un genio del mal. El lugar donde está recluido se llama Santa Elena, un islote a miles de kilómetros de la costa más cercana, infestado de ratas y custodiado por el ejército británico.

En la primavera de 1819, François-René de Chateaubriand y su amante, Delphine Sabran, zarparon rumbo a esta isla perdida en medio del océano. El gran escritor de su época y la marquesa de Custine quieren poner a prueba su amor como las parejas más famosas de la historia, como Antonio y Cleopatra, como Romeo y Julieta, superando dos grandes obstáculos: una gran distancia y un gran adversario. Después de meses de navegación, ¿podría haber un enemigo más temible para estos dos hijos de la aristocracia francesa? Después de su encuentro con el Emperador que causó estragos en toda Europa, Chauteabriand y Delphine están aterrorizados al descubrir que los monstruos pueden tener muchas caras.